Expertos en justicia y seguridad explican cómo funciona este dispositivo y qué restricciones conlleva su uso en el marco del arresto domiciliario.

La tobillera electrónica es un dispositivo de rastreo constante que monitorea la ubicación de la persona en tiempo real. En el caso de Cristina Kirchner, permitiría a las autoridades verificar que no ingrese ni salga de su domicilio sin autorización judicial. En caso de violación de perímetro, se emitirían alertas automáticas a la custodia y al Tribunal Oral Federal.

Alternativamente, los especialistas consultados sostienen que su custodia permanente por la Policía Federal podría reemplazar el uso de la pulsera. Argumentan que esta modalidad de vigilancia ofrece mayor flexibilidad, sin depender de la tecnología del dispositivo, que puede fallar o requerir mantenimiento.

El tribunal aún no definió si Cristina utilizará la tobillera o quedará bajo custodia exclusiva. En caso de optar por la pulsera, se trazará un perímetro monitorizado. De lo contrario, su custodia policial deberá garantizar el cumplimiento del arresto domiciliario, cumpliendo con la ley de prisión domiciliaria para personas mayores de 70 años .