Las primeras semanas de noviembre mostraron una fuerte aceleración en los precios de alimentos, con especial incidencia en la carne, según indicadores privados. El relevamiento señala subas significativas en cortes bovinos por una menor oferta y mayor demanda exportadora, lo que presiona sobre los valores internos. La dinámica refuerza las proyecciones de un mes con incrementos por encima del promedio.

La tendencia alcista también impacta en otros productos de la canasta básica, lo que preocupa a consumidores y comercios de cercanía. Analistas advierten que la estacionalidad de fin de año y los costos de producción podrían profundizar las subas en las próximas semanas. El sector frigorífico anticipa un escenario de precios firmes si no se corrigen los desequilibrios entre oferta y demanda.